La escalada del conflicto entre Irán e Israel puede tener un importante impacto negativo en el mercado de diamantes pulidos, porque Israel fue
uno de los cinco mayores exportadores de este mineral en 2022, destacan a Sputnik varios expertos de la empresa de inversiones Grupo Financiero Anderida.
"La reacción de los mercados se dirigirá al crecimiento del interés por los activos de protección, es decir, es probable que el [precio] del oro siga subiendo (...) Además, los minerales y posiblemente el carbón subirán de precio", comenta el estratega jefe de la empresa de inversiones Vector X, Maxim Judálov.
El director de proyectos de la empresa Implementsa, Iván Timonin, destaca que "es probable que la escalada de la crisis en Oriente Medio sea otro argumento a favor de evitar los envíos de gas natural licuado [GNL] a través del canal de Suez y desviar los flujos sorteando el Cabo de Buena Esperanza, ubicado en el extremo sur de África".
Al mismo tiempo, en sus palabras, la reorientación de los suministros aumentará la duración del transporte y, en consecuencia, encarecerá la logística.
Además, si el conflicto se agrava, el mercado de GNL podría sufrir consecuencias más dramáticas. Si Irán decide cerrar el estrecho de Ormuz, esto cortaría el mercado mundial del gas natural licuado producido en Catar, Omán y los Emiratos Árabes Unidos (EAU), que en conjunto proporcionan alrededor del 25% del suministro mundial total del producto, agrega el analista.
Los ataques de Teherán se lanzaron después de un presunto
ataque aéreo israelí contra el edificio del Consulado iraní en la capital siria de Damasco el 1 de abril, en el que murieron varios comandantes del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica, incluidos dos generales.
El 13 de abril,
Irán disparó una oleada de alrededor de 300 proyectiles desde su territorio hacia Israel, incluidos 170 drones, 30 misiles de crucero y 120 misiles balísticos, activando sirenas de ataque aéreo en todo el país. El Ejército israelí dijo que el 99% de los proyectiles habían sido interceptados por las defensas aéreas israelíes y de los países aliados. Según el país persa, fue un acto de legítima defensa.
Numerosos países
condenaron el ataque de Irán a Israel e instaron a las partes a actuar con moderación para evitar una escalada en Oriente Medio.
El 14 de abril, el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Irán dio por
finalizada su operación Verdadera Promesa contra Israel y anunció que no tiene la intención de continuarla, pero advirtió al mismo tiempo al Estado hebreo que, si intenta una acción en suelo iraní o contra instalaciones iraníes en Siria u otro país, la próxima respuesta va a ser aún más contundente.