El protagonista del vídeo escaló una gran palmera que estaba inclinada y que generaba peligro para las personas que viven cerca y pasan por allí. Al llegar a la cima, cortó las ramas con una motosierra que llevaba consigo.
En ese momento, la palmera se convirtió en una catapulta y su tronco, al liberarse de la cima, empezó a columpiarse de un lado al otro. Al hombre solo le quedó agarrarse de la palmera lo más fuertemente posible y esperar hasta que la oscilación se calmara a una altura increíble.
La escena tuvo lugar en San Bernardino, California.