"Las ventas que se generaron el lunes, por entregas a domicilio, fueron de 53 millones de dólares a nivel nacional", dijo Pablo Arosemena, presidente de la Federación de Cámaras de Comercio de Ecuador.
Según el dirigente gremial, la mayoría de las ventas están relacionadas con la paralización durante la pandemia, principalmente de electrodomésticos y vestimenta.
En Ecuador, al momento, y como parte de las medidas para controlar la propagación del COVID-19, solo pueden realizarse ventas a domicilio, además de las ventas físicas de alimentos y medicinas.
Arosemena dijo que es una "buena noticia" la reactivación de aproximadamente 76.000 comercios formales solo el lunes, porque generan liquidez, permiten sostener empleo y generar al gobierno recursos para continuar la tarea de transferir recursos a quienes más lo necesitan.
Sin embargo, el gremialista advirtió que si la pandemia sigue afectando a Ecuador y se mantiene la recesión, ocasionada entre otras cosas por la paralización del sector comercial y productivo, se podría perder medio millón de empleos.
Arosemena sugirió al Gobierno Nacional no crear más impuestos ni otorgar subsidios, sino permitir al comercio formal reabrir, con todos los protocolos de bioseguridad, para evitar la pérdida de más empleos.
La transición está ligada a un sistema de semaforización que permite a los alcaldes del país decidir el color de semáforo en cada ciudad, de acuerdo con el comportamiento de la pandemia.
De acuerdo con el color de semáforo, las autoridades determinarán qué actividades se reabren y cuándo.