"La política de sanciones unilaterales de los EEUU ha sido dirigida hacia empresas que compiten en el mercado global, como lo es Rosneft, para tratar de influir en el sistema de precios, controlar o eliminar los principales actores y, en consecuencia, así ejercer un control hegemónico del mercado petrolero mundial", indicó PDVSA en un comunicado.
De acuerdo al texto, la discriminación y el odio promovidos por EEUU, buscan afectar la economía venezolana.
"La discriminación económica y el odio, como instrumentos políticos, promovidos por el Gobierno de EEUU hacia la principal empresa petrolera del país, PDVSA, tiene como objetivo la destrucción de la economía nacional y, por ende, afectar el presupuesto de protección socio-económica del Pueblo Venezolano", indica el comunicado.
El 18 de febrero EEUU impuso sanciones a Rosneft Trading S.A. y a uno de sus directores, Didier Casimiro, por su colaboración con Venezuela.
EEUU acusa a Rosneft Trading S.A de manejar las exportaciones de petróleo de Venezuela para eludir las sanciones que Washington aplica al país sudamericano.
Además, el Departamento del Tesoro de EEUU dio 90 días de plazo para que las compañías suspendan los negocios que están realizando con esta firma rusa.