"Debido a la opinión negativa de una de las instituciones que se encargan de la emisión de visados de larga duración a los diplomáticos, [el visado] no será emitido al ciudadano ruso que en este momento se encuentra en Moscú y debe asumir el cargo de agregado militar de la Embajada rusa en Sofía", publicó el medio.
Rusia, según Focus, fue notificada de esa decisión.
La agencia subrayó que el ciudadano ruso en cuestión no fue declarado persona non grata.
El 28 de octubre, la agencia de noticias Focus, citando a la Cancillería búlgara, informó que las autoridades de Sofía expulsaron del país a un diplomático ruso sospechoso de realizar actividades de espionaje.
El medio señaló que se trata del primer secretario de la Embajada rusa en Bulgaria, que supuestamente desde septiembre de 2018 ha llevado a cabo "reuniones regulares de conspiración" con ciudadanos búlgaros para acceder a "información clasificada sobre la República de Bulgaria, la Unión Europea y la OTAN".
El 29 de octubre, el viceministro de Exteriores ruso Alexandr Grushkó declaró que Rusia tomará medidas de respuesta tras la expulsión de uno de sus diplomáticos.