La tormenta y las lluvias intensas que afectaron Tokio y varias regiones vecinas, dejaron sin luz a 5.200 casas en la prefectura de Kanagawa.
A mediados de agosto el fuerte tifón Krosa, que azotó el oeste de Japón, provocó lluvias torrenciales con fuertes vientos de 45 metros por segundo y oleaje alto.
Más de 7.000 personas fueron evacuadas entonces en la parte oriental y occidental del archipiélago.