"La población de la RDC aprecia mucho el aporte de los especialistas rusos que llegaron al Congo para combatir el ébola. Nuestro Ministerio de Sanidad valora especialmente las vacunas rusas que son muy eficaces, se conservan y se transportan fácilmente y no provocan efectos colaterales", señaló.
Por su parte, la vicedirectora del departamento de cooperación internacional del Ministerio de Salud de Rusia, Daria Shimanovskaya, aseguró que los estudios sobre la vacuna rusa contra el virus del Ébola que se realizan en Guinea, terminarán a finales de 2019.
"En la República de Guinea a finales de este año terminarán los estudios de la vacuna rusa GamEvac-Combi para la profiláctica del ébola, que se realizan después de su detección", dijo.
Añadió que se trata de uno de los proyectos más importantes en la esfera de salud realizado por Rusia en África.
El virus del Ébola provoca una enfermedad grave con una tasa de mortalidad que llega al 50%.
El brote de ébola de 2013-2016 en África Occidental, que surgió en Guinea y luego se extendió a Sierra Leona y Liberia, así como, en menor medida, a otros países, fue el mayor y más complejo desde que el virus se descubrió en 1976, dejó más de 11.300 muertos, según los datos de la Organización Mundial de la Salud.