"La idea es muy simple: captar la señal de las torres televisivas y de comunicaciones que rebotan de los objetos voladores. En otras palabras, el propio radar solo recibe señales y no las emite, lo que significa que ni se ve, 'ni se escucha'", compartió con Sputnik el director general de le empresa, Alexandr Petrov.
Según el especialista, las pruebas finales culminaron con éxito y ya existen varios clientes interesados en obtener el Tropa, incluidas las agencias de seguridad, así como clientes privados que desean garantizar su privacidad y protegerse de los drones espía.
El sistema está diseñado para funcionar en zonas habitables del planeta y mientras más densa la cobertura de radio, televisión y comunicación, más preciso funciona.
Mientras tanto: Rusia responderá al despliegue de un radar de EEUU en Noruega