"El Gobierno de EEUU violó la Convención de Viena esta mañana [16 de mayo] al arrestar al grupo Embassy Protection Collective. Las cuatro personas que fueron arrestadas pasarán la noche en la cárcel y comparecerán ante una corte federal mañana por la mañana", explicó Becker.
Los activistas del grupo vivían dentro de la embajada de Venezuela, autorizados por el Gobierno, desde el 10 de abril para evitar que la oposición tomara las instalaciones, siguiendo las órdenes de Washington de que los diplomáticos de la misión abandonaran sus instalaciones.
El 13 de mayo, agentes del Servicio Secreto irrumpieron en la embajada y ordenaron a los activistas que abandonaran el edificio o de lo contrario serían encarcelados y procesados.
Anteriormente, el Servicio Secreto y agentes del Departamento de Estado entraron a la embajada y detuvieron a los cuatro activistas que habían ignorado las amenazas y permanecían en el lugar, confirmaron ambas agencias federales a Sputnik.
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Becker dijo que los activistas ahora enfrentan un cargo llamado "interferencia con ciertas funciones de protección".
"Curiosamente, estos cuatro individuos no han sido acusados de entrada ilegal. En su lugar, han sido arrestados por un cargo federal no relacionado con la entrada ilegal. La razón de esto es que el Departamento de Estado sabe que pisa terreno peligroso en lo que respecta al derecho internacional. Este cargo le permite al Gobierno eludir la cuestión de qué entidad tiene la propiedad legal sobre la embajada", añadió.
El viceministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Carlos Ron, denunció los arrestos y dijo que agentes de la ley de Estados Unidos ingresaron ilegalmente a la embajada.
Pero las autoridades estadounidenses violaron la Convención de Viena al ingresar a la embajada para realizar los arrestos, dijo a Sputnik la abogada de los cuatro activistas detenidos, Mara Verheyden-Hilliard.
Verheyden-Hilliard explicó que el Gobierno venezolano del presidente Nicolás Maduro, reconocido en la ONU, nunca dio permiso a las autoridades estadounidenses para ingresar a las instalaciones, lo que significa que su entrada constituye una violación del derecho internacional.
La abogada advirtió que la medida de Estados Unidos envía una señal que podría poner en peligro las propias misiones diplomáticas del país en el extranjero.
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En marzo, Estados Unidos tomó el control de tres instalaciones diplomáticas venezolanas en el país, incluidos dos edificios militares que pertenecen al Ministerio de Defensa.