La Articulación de los Pueblos Indígenas de Brasil (APIB), convocante de la movilización informó este 23 de abril en un comunicado que los actos del día 24 contemplan el encuentro de las delegaciones indígenas y una marcha en dirección a la sede del Tribunal Supremo Federal.
En su documento de convocatoria de la movilización, publicado a principios de abril, la APIB destaca que este año el contexto es "gravísimo", empezando por el "desmonte" de la Fundación Nacional del Indio (FUNAI), el órgano estatal encargado de la política de pueblos indígenas.
En el primer día de Gobierno, Bolsonaro transfirió la principal competencia de la FUNAI, la demarcación de las tierras indígenas, al Ministerio de Agricultura, controlado por "la bancada ruralista" (los parlamentarios con intereses en el sector agrícola y ganadero).
"Eso fue seguido de una serie de ataques e invasiones articuladas contra las tierras indígenas, persecución y expresión de racismo e intolerancia hacia nuestros pueblos y nuestras vidas", recordó la APIB, organizadora del campamento Tierra Libre.
La organización del campamento indígena viene precedida de polémica pues el Gobierno autorizó el uso de la Fuerza Nacional en la Explanada de los Ministerios de Brasilia, lo que los convocantes interpretaron como una forma de intimidación.
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La Fuerza Nacional es un cuerpo formado por bomberos, policías y militares que se usa en ocasiones puntuales, sobre todo para episodios de violencia urbana, desorden y disturbios.
