Bolsonaro entregó el borrador personalmente al presidente de la Cámara de Diputados, Rodrigo Maia, que ya ha asegurado que espera que la reforma pueda llevarse a votación en el mes de junio, tras pasar por diversas comisiones de análisis, según informó en un comunicado la Cámara de Diputados.
Por el momento, los integrantes de las Fuerzas Armadas quedan fuera de esta propuesta, aunque el Gobierno asegura que presentará un texto específico para los militares en menos de 30 días.
El principal objetivo del Gobierno con esta reforma es reducir el agujero en las cuentas públicas, mayoritariamente causado por las pensiones (292.000 millones de reales de déficit de 2018, casi 80.000 millones de dólares).
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Al reducir el déficit público en los próximos años se espera poder frenar el aumento del endeudamiento, que cerró 2018 con 76,7% del Producto Interno Bruto, según datos oficiales.
La reforma, que ya intentó aprobar sin éxito el expresidente Michel Temer (2016-2018), es muy esperada por el mercado financiero; la Bolsa de Sao Paulo operaba con subidas al conocerse algunos de los detalles del texto.