Hace diez años, el paladio costaba menos de 200 dólares por onza troy, señala Maxim Rúbchenko, columnista de la edición en ruso de Sputnik. Este metal noble forma parte del llamado 'grupo del platino'. Ambos metales se utilizan en los catalizadores para automóviles: el platino — para los de diésel, y el paladio — para los de gasolina.
No obstante, la situación cambió radicalmente después del escándalo de vehículos Volkswagen en septiembre de 2015, cuando se reveló que la empresa había instalado ilegalmente un software para alterar los resultados de los controles técnicos de emisiones contaminantes en 11 millones de automóviles con motor diésel. Así se disipó el mito sobre su mayor sostenibilidad ecológica.
Los gobiernos comenzaron a cerrar los programas de apoyo para la venta de los motores a diésel, y los automovilistas empezaron a cambiar masivamente a motores de gasolina.
La época del oro se está acabando… ¿Qué metal tomará su lugar? https://t.co/uUTFuUXBsd
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) December 14, 2018
En consecuencia, la demanda de los catalizadores de paladio aumentó considerablemente, pero los productores del metal no estaban preparados para este brusco cambio. Según la empresa Johnson Matthey, este año el déficit en el mercado del paladio será aún mayor, puesto que se espera un fuerte endurecimiento de las regulaciones del escape de gases.
Al mismo tiempo, la falta de paladio llevó al auge del negocio de reciclar los viejos catalizadores de automóviles. Los pioneros fueron los japoneses, que ya en los años 2000 habían construido una fábrica para la extracción de platinoides de los componentes de automóviles viejos.
El ejemplo de los japoneses se esparció por el mundo: actualmente, en internet hay muchos anuncios sobre la compra de viejos catalizadores. Pero esto también dio lugar al aumento de ladrones de catalizadores de automóviles.
Según The Wall Street Journal, este problema se agravó, en particular, en Chicago, donde operan varias pandillas de delincuentes que se dedican a robar catalizadores de los coches aparcados en las calles por las noches.