"Varios riesgos podrían dañar aun más la perspectiva para América Latina y el Caribe", indicó el FMI en su trabajo Perspectivas Económicas Regionales para América Latina y el Caribe, y añade: "Por ejemplo, la escalada de tensiones comerciales entre China, o un enlentecimiento en las grandes economías, podría derivar en una menor expansión comercial para la región".
A principios de diciembre pasado, al margen de la cumbre del Grupo de los 20 (G20) países industrializados y emergentes celebrada en Argentina, los líderes de las dos mayores economías del mundo acordaron una tregua en la guerra comercial.
El presidente chino, Xi Jinping, prometió corregir el desequilibrio importando más productos agrícolas, energéticos e industriales de EEUU.
Además: La guerra comercial entre EEUU y China podría tener graves consecuencias para otros países
Trump, por su parte, acordó suspender los planes para aumentar los aranceles a productos chinos por un valor de 200.000 millones de dólares del 10 al 25% para allanar el camino para las negociaciones con Pekín, pero advirtió que si las tratativas no tienen éxito dentro de tres meses las tarifas serán establecidas según lo planeado.
Economía de Venezuela
La actual crisis en Venezuela continuará afectando la economía del país en 2019, derivando en pérdidas acumuladas de más de 50% en el producto interno bruto (PIB) desde 2013, advirtió el FMI.
"Se proyecta que el PIB real se reducirá aun más en 2019, acumulando una caída desde 2013 de más de 50%", indicó el organismo multilateral.
Venezuela entró en una nueva espiral de tensión a partir del 10 de enero, cuando el presidente Nicolás Maduro asumió su nuevo mandato hasta el año 2025.
Maduro calificó la declaración de Guaidó de un intento de golpe de Estado y responsabilizó a EEUU de haberlo orquestado.
Varios países de la región reconocieron a Guaidó como presidente interino, mientras que la Unión Europea llamó a iniciar un proceso político con elecciones libres.
También: EEUU reconoce a Guaidó: un "plan de intervención" en Venezuela
México y Uruguay dijeron que el Gobierno está aún en manos de Maduro pero instaron a hallar una salida pacífica a la crisis, mientras que los líderes de Cuba y Bolivia expresaron su respaldo al presidente bolivariano.