"Las unidades antiterroristas del Consejo Militar desarmaron una célula terrorista compuesta por 7 personas, miembros de los grupos de oposición que habían participado en la operación Ira del Éufrates [para recuperar Al Raqa]", señala el comunicado.
Se subraya que esos grupos "contaban con el apoyo de Turquía y actuaban en connivencia con los servicios de Inteligencia de ese país".
Los terroristas guardaban una gran cantidad de armas, entre ellas granadas y fusiles Kalashnikov y M6.
El 16 de enero, en un restaurante en Manbij se produjo una explosión —probablemente obra de un terrorista suicida— que segó la vida de varios soldados estadounidenses.
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, comunicó que la explosión mató a 20 personas y fue reivindicada por ISIS (autodenominado Estado Islámico, organización terrorista prohibida en Rusia).
Además: Una delegación conjunta de Francia y EEUU llega a Manbij para investigar el ataque terrorista
A su vez, el Comando Central del Ejército de EEUU (CentCom) informó que murieron cuatro estadounidenses en total: dos militares, un empleado civil del Pentágono y un trabajador contratado.