"Pese a una desaceleración en 2018, se espera que Panamá continúe entre las economías más dinámicas en la región con bases firmes. La perspectiva sigue siendo positiva, aunque enfrentada a mayores riesgos de una tendencia a la baja. Se prevé un crecimiento de 4,3% en 2018, pero con una recuperación para 2019 de 6,3% respaldada por la apertura de una extensa mina (Minera Panamá) y una recuperación en la construcción", informó la entidad.
El organismo dijo que el país centroamericano registraría un crecimiento estimado de 3,7%, frente a uno de 5,4% del mismo período del año anterior, una expansión menor que refleja una desaceleración en sectores clave incluyendo la construcción, que se vio afectada por una huelga en abril y mayo.
Los riesgos principales que enfrenará el país, según el FMI, se relacionan con reveses al implementar las recomendaciones del Grupo de Acción Financiera (GAFI), una continua sobreoferta en el mercado doméstico de bienes raíces, un mayor proteccionismo comercial y la incertidumbre ante las próximas elecciones generales.
También señaló la incertidumbre por la concreción del proyecto minero Cobre Panamá, una inversión de 6.300 millones de dólares de la canadiense First Quantum, debido a que el Tribunal Supremo del país latinoamericano declaró como inconstitucionales partes del contrato.
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Además, el FMI recomendó medidas para reforzar la resistencia del sistema financiero y reformas para garantizar un crecimiento continuo.