El presupuesto está 2,8 billones de yenes por encima del gasto estipulado en el plan quinquenal en vigor.
Sin embargo, el programa aprobado por el Gobierno y el Consejo de Seguridad Nacional indica expresamente que el gasto real en defensa será "del orden de 25,5 billones de yenes" gracias a la revisión de proyectos con baja efectividad de costos y la discontinuación de equipos de menor importancia, según el diario The Mainichi.
Entre otras cosas, el programa prevé la compra de 18 aviones de combate de despegue corto y aterrizaje vertical F-35B, la modernización de los destructores portahelicópteros de la clase Izumo para que puedan llevar aviones, la formación de nuevas unidades de defensa cibernética y espacial, así como el despliegue de dos sistemas de combate Aegis Ashore.
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