"La difusión de desinformación de manera premeditada, abarcadora y sistemática, incluida la que forma parte de la guerra híbrida, es un desafío fuerte y estratégico para nuestros sistemas democráticos", indica el documento.
Días antes la Comisión Europea anunció que contribuirá a la creación de una red de verificadores de hechos independientes para luchar contra la desinformación en el territorio de los países de la UE.
En noviembre de 2016, el Parlamento Europeo aprobó una resolución titulada 'Comunicaciones estratégicas de la Unión Europea: con el fin de contrarrestar la propaganda'.
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El documento afirma que Rusia supuestamente financia ciertos partidos políticos opositores en la UE.
Moscú catalogó esa resolución como una "degradación de la democracia" en Europa.
