"En la reunión con los ministros plantearé el reto que enfrentamos, se trata de un nuevo misil ruso que amenaza el Tratado INF", dijo a la prensa.
Precisó que en el continente europeo no hay nuevos misiles estadounidenses, pero sí hay rusos.
A finales de octubre Stoltenberg expresó su preocupación por el nuevo sistema de misiles ruso, conocido como el 9M729 o SSC-8.
El 20 de octubre pasado, el presidente de EEUU, Donald Trump, declaró que su país abandonaría el Tratado INF alegando violaciones del acuerdo por parte de Rusia.
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El mandatario estadounidense añadió más tarde que EEUU incrementará sus capacidades nucleares hasta que otros países como Rusia y China "entren en razón".
Además, el 19 de noviembre el presidente ruso, Vladímir Putin, advirtió que Rusia no dejará sin respuesta la posible retirada de EEUU del pacto.
El Tratado INF, firmado por Washington y Moscú en 1987, no tiene fecha de caducidad y prohíbe a las partes disponer de misiles balísticos terrestres o misiles de crucero con un radio de acción de entre los 500 y los 5.500 kilómetros.
Rusia y EEUU se han acusado mutuamente en varias ocasiones de desarrollar sistemas que violan este pacto.