"Hace dos semanas empresas de España, Estados Unidos e Inglaterra arrancaron la revisión de los proyectos (…) que el Presidente de la República pidió hace un año al secretario de Naciones Unidas (…) para determinar si tienen sobreprecios o algún tipo de viso de corrupción", dijo en conferencia de prensa el secretario particular de la Presidencia, Juan Sebastián Roldán.
Los proyectos que se revisan están ubicados en el oeste del país, sobre la Costa Pacífica, y son el de almacenamiento de gas licuado de petróleo Monteverde-Chorrillos, ubicado en las provincias de Santa Elena y Guayas; el proyecto de licuefacción de gas natural Bajo Alto, en la provincia de El Oro; el poliducto Pascuales-Cuenca para transporte de combustibles desde Pascuales (Costa Pacífica) hasta Cuenca (sur); y el proyecto Refinería del Pacífico.
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Para analizar el quinto proyecto, que es la repotenciación de la refinería de Esmeradas, también en el oeste, se convocará a licitación, como en las demás.
Según Roldán, los resultados de las investigaciones serán entregados dentro de entre 60 y 90 días y se derivarán, según el caso, a las instancias pertinentes para judicialización o sanción.
Los cinco proyectos son los más emblemáticos del Gobierno de Correa en el sector petrolero, pero todos ellos han tenido serios problemas técnicos y fueron blanco de fuertes críticas, particularmente el de la refinería del Pacífico, que debió realizarse con la estatal venezolana PdVSA y el cual solo llegó a la fase de remoción de tierras, etapa en la que se invirtieron 1.500 millones de dólares.
El proyecto de repotenciación de la Refinería de Esmeraldas, la más importante del país, para el cual se prevé contratar la auditoría en los próximos días, terminó costando 2.200 millones de dólares, contra un presupuesto inicial de alrededor de 187 millones de dólares.