El hombre, de 53 años, cuenta con antecedentes penales en Rusia.
Se los considera presuntos autores de numerosos robos con fuerza en domicilios de Barcelona y su área metropolitana.
Trece de los detenidos ingresaron en prisión provisional después de declarar ante el juez, los otros dos quedaron en libertad con cargos.
Hasta la fecha, informa el comunicado de la Policía catalana, se les imputó la autoría de 22 robos, pero la cifra podría aumentar a medida que avance la investigación y se analicen los objetos recuperados; también podría elevarse el número de detenidos.
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Los Mossos d'Esquadra intervinieron más de 13.000 euros en efectivos, dos kilos de joyas en oro, dispositivos electrónicos y una gran cantidad de material destinado a forzar puertas y cajas fuertes.
Para cometer los robos, los criminales se dividían en grupos de cuatro personas, cada una de ellas especializada en una tarea, como la apertura de puertas, candados y cajas fuertes, conducción, vigilancia, etcétera, habiendo un intercambio de información constante entre ellas.