"La mayoría de las áreas de Carolina del Norte se verán afectadas por la tormenta, incluso en las áreas occidentales", afirmó Cooper a periodistas, según un video difundido por sus cuentas de las redes sociales.
El gobernador agregó que "la fuerza de la tormenta tropical es tan potente que puede destruir edificios en la costa" y las condiciones continuarán deteriorándose, pues la marejada ciclónica causará que los ríos se desborden.
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Actualmente, unas 12.000 personas se encuentran en 126 refugios y las autoridades están evaluando abrir otros, anunció Cooper, debido a que los residentes seguirán evacuando a medida que la tormenta se mueva por el territorio.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC por sus siglas en inglés) emitió un aviso público en relación al huracán Florence en el que indica que "vientos con fuerza de huracán se acercan a los Bancos Externos (cadenas de islas) y las áreas costeras del sureste de Carolina del Norte, se esperan lluvias y marejadas ciclónicas amenazantes para la vida".
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Los vientos máximos sostenidos permanecen, según el NHC, cercanos a los 155 kilómetros por hora con ráfagas más altas.
"Se esperan pocos cambios en la intensidad antes de que el ojo de Florence llegue a la costa, luego se espera que se debilite al moverse tierra adentro, se pronostica más debilitamiento significativo este sábado a medida que Florence se mueva más rápido en tierra en el centro de Carolina del Sur (este)", añade el aviso.
La administración del presidente de EEUU, Donald Trump, prepara recursos clave y personal para dar respuesta a las amenazas que representan los huracanes Florence, Olivia, Mangkut y la tormenta Isaac, informó la Casa Blanca en un comunicado.
Como forma de previsión, Trump firmó declaraciones de emergencia para Carolina del Norte, Carolina del Sur, Virginia (este), Hawái y el estado asociado de las Islas Marianas del Norte.