El canciller turco hizo tal declaración en Izmir, durante la apertura de la sede reparada del Consulado General de Grecia. En la ceremonia participó su homólogo griego, Nikos Kotzias.
Tras su liberación, lograda el 14 de agosto, la Cancillería griega expresó la esperanza de que las relaciones greco-turcas se desarrollen en espíritu de amistad entre ambos pueblos.
"Turquía y Grecia son países clave de nuestra región, representan a dos grandes civilizaciones, a veces no podemos ponernos de acuerdo por existir divergencias (…), pero buscamos una salida en la cooperación y el diálogo", dijo Cavusoglu.
También señaló que "Turquía no se permitiría acoger a unos sediciosos que intentasen organizar un golpe de Estado en Grecia".
Kotzias, a su vez, afirmó que Grecia "estaba junto con Turquía durante la intentona golpista" de julio de 2016.
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La noche del 15 al 16 de julio de 2016, varias unidades del Ejército turco intentaron derrocar al presidente Recep Tayyip Erdogan, pero los ataques fueron sofocados y el golpe de Estado resultó frustrado.
Las autoridades turcas siguieron insistiendo en su extradición, pero el tribunal griego se lo negó al considerar que en la patria les amenazaban torturas y la muerte.
A principios de junio pasado, Grecia liberó a los ocho militares turcos de la prisión preventiva dada la expiración del plazo tope de detención prejudicial.
