El Gobierno de Tsipras expulsó el 11 de julio a dos diplomáticos rusos y prohibió a otros dos el ingreso al país por supuestas acciones "encaminadas a interferir en el problema de la antigua república yugoslava de Macedonia", un mes después Moscú respondió con una medida simétrica.
"El primer ministro de Grecia desea visitar Moscú antes de fin de año", dijo una de las fuentes a Sputnik.
Aseguró también que el primer ministro griego estudia mantener una comunicación telefónica con el presidente ruso, Vladímir Putin.
"Es posible que el diálogo se produzca en los próximos diez días", puntualizó.
Otra fuente del Gobierno griego señaló que la visita de Tsipras a Moscú podría tener lugar en noviembre, como estaba inicialmente previsto.
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Destacó que la mayoría de la sociedad civil griega aboga por la normalización de las relaciones con Rusia y rechaza la crisis diplomática.
"Los griegos creen que la actual situación es anormal (…) Se debe restablecer las relaciones ya que muchas cosas unen a los dos pueblos", dijo.
Los políticos, agregó, deben entender que unas malas relaciones no responden a los intereses de los dos pueblos.