Anteriormente, el comandante de la operación ucraniana en Donbás, Serguéi Náev, anunció que el territorio controlado por los militares ucranianos en esta región se incrementó en 15 kilómetros cuadrados, y que el Ejército tiene la intención de alejar sus posiciones de los núcleos poblados.
"La declaración de Náev solo confirma que Kiev viola los acuerdos de Minsk", señaló el interlocutor de la agencia.
"Pese a ello no se puede hablar de victorias reales de Kiev, lo único que pueden hacer los militares ucranianos es entrar en los poblados de la zona 'gris' en los que no hay unidades nuestras y presentarlo como una victoria y la 'liberación' de territorios", afirmó.
La fuente recordó que durante el conflicto los militares ucranianos, en violación de los acuerdos de Minsk, "ocuparon varias veces poblados que ellos mismos controlaban en la zona neutral, y solo tomaron el poblado de Shirókino, que se proponía desmilitarizar".
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"Las palabras de Náev sobre los planes futuros de los militares para 'mejorar' sus posiciones solo confirman que Kiev no tiene como objetivo solucionar pacíficamente el conflicto en Donbás y busca mejorar el estado de ánimo de sus combatientes", resumió.
Los acuerdos de Minsk, suscritos en septiembre de 2014 y en febrero de 2015, sentaron las bases para una solución política del conflicto pero no han derivado hasta ahora en el cese de la violencia cuyo resultado la ONU estima en más 10.300 muertos.
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El pasado 30 de abril, el presidente ucraniano, Petró Poroshenko, firmó un decreto que pone fin a lo que Kiev denomina una "operación antiterrorista" en Donbás y da inicio a una "operación de las fuerzas conjuntas" bajo el mando de los militares.