Unos 25 militares y 15 civiles, de acuerdo a este medio, resultaron heridos en los combates.
Los insurgentes lanzaron un ataque coordinado desde las cuatro direcciones y se hicieron con el control de varias partes de la ciudad hasta que fueron expulsados hacia la periferia.
El portavoz de las fuerzas estadounidenses en Afganistán, teniente coronel Martin O'Donell, confirmó en declaraciones al canal Tolo News que varias instalaciones militares y de seguridad en Ghazni fueron objeto de ataques en la noche del 9 al 10 de agosto.
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Los militares de EEUU, según él, ayudaron a las fuerzas de seguridad locales a repeler la ofensiva enviando helicópteros de ataque y un dron.
O'Donell dijo que los enfrentamientos cesaron hacia las 8.00 (3.30 GMT).