Poco antes, Downing Street publicó un comunicado informando que el pasado 24 de julio, durante una entrevista con el emir de Catar, Tamim bin Hamad Zani, May coincidió con el líder catarí en la necesidad de mantener con Rusia "relaciones basadas en la unidad y la fuerza, hacer frente conjuntamente a acciones malintencionadas, así como defender los principios y las normas universales".
"Estudiamos atentamente la declaración de Downing Street y nos quedamos muy asombrados, pues descubrimos que el correspondiente comunicado de prensa, publicado por la parte catarí, no decía ni una palabra de Rusia", dijo la diplomática.
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Zajárova destacó que "el hecho de que Doha supuestamente se solidarizó con el enfoque rusófobo de May, bien conocido, fue además rechazado categóricamente por nuestros socios de Catar en conversaciones sostenidas con diplomáticos en la embajada de Rusia".
"Como resultado, las declaraciones correspondientes de Londres se vuelven cada vez menos convincentes y fidedignas, y disminuye poco a poco la confianza que depositan en ellas los socios extranjeros de Reino Unido", advirtió la diplomática.