La diputada de la CUP Maria Sirvent afirmó en una comparecencia en el Parlamento de Cataluña que el partido de la izquierda independentista radical enviaba con ello un "mensaje claro" y que va a "frenar todo intento de pacto y de cierre por arriba".
"No se pude defender desde la retórica la República por una parte y, al mismo tiempo, seguir aplicando desde dentro del marco autonómico políticas neoliberales que ahogan a la mayoría de ciudadanos", declaró Sirvent.
Hacerlo, continuó, demuestra una postura "sometida, acomplejada, humillada" y sirve para "dar alas a la represión".
A juicio de la CUP, fue la "desobediencia activa y no violenta" la que permitió la celebración del referéndum unilateral de autodeterminación del 1 de octubre.
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"Nos autotutelamos un derecho negado", comentó al agregar que "mantener diálogos que no son reales nos llevan al retroceso y al apuntalamiento del régimen del 78", en referencia al sistema político surgido de la Constitución Española aprobada en ese año.
