La comisión, informa Nació Digital, tendrá como fin aclarar, entre otros, qué vínculo tenía el cerebro de los atentados, el imán del municipio de Ripoll Abdelbaki Es Satty, con el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) —los servicios secretos españoles—, del que fue informante años atrás según datos revelados por la prensa.
La comisión cuenta con el apoyo del grupo socialista y Catalunya En Comú-Podem, mientras que los conservadores del Partido Popular (PP) y los liberales de Ciudadanos (C's) se abstuvieron y acusaron al independentismo de querer instrumentalizarla para su causa.
Tema relacionado: El yihadista detenido en Barcelona "quería decapitar a una persona al estilo de Daesh"
El grupo socialista pidió ya que toda información sensible se declare "reservada" con la finalidad de esclarecer mejor los hechos y trabaje con las autoridades españolas en su investigación, mientras desde Catalunya En Comú-Podem el diputado Joan Josep Nuet reclamó que no se haga "un uso partidista" ni "demagogia en temas de seguridad".
"Pedimos rigor: no convirtamos las políticas de seguridad en un espectáculo mediático", insistió Nuet.
La Candidatura d'Unitat Popular (CUP), que aglutina a la izquierda independentista radical, solicitó además que la comisión ahonde en "la geopolítica que crea el caldo de cultivo" de este tipo de atentados.
En los atentados de Barcelona y Cambrils del 17 de agosto de 2017 fallecieron un total de 16 personas (sin incluir a los ocho terroristas) y un total de 152 personas resultaron heridas.
Los ataques fueron reivindicados por ISIS, acrónimo del autodenominado Estado Islámico, organización terrorista proscrita en Rusia y otros países.