"El pueblo de Corea del Norte enfrenta unas violaciones indignantes de los derechos humanos por el Gobierno en casi todas las categorías revisadas", dice el informe.
En particular, acusa al Gobierno norcoreano de ejecuciones sumarias, desapariciones, torturas, tráfico humano y violaciones de las libertades fundamentales.
Según varias ONG, citadas en el documento, los trabajadores extranjeros contratados en Corea del Norte están sometidos a trabajos forzosos.
Se agrega que las autoridades norcoreanas no procuran investigar ni enjuiciar a ningún funcionario responsable de los abusos.
Los informes anuales del Departamento de Estado son obligatorios por la legislación de EEUU y documentan el estado de los derechos humanos y de los trabajadores en casi 200 países y territorios.
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