"Nuestro primer equipo descubrió en la planta cuerpos de seis fallecidos, también hay heridos, algunos de ellos de gravedad", dijo Kerekova en declaraciones a la televisión checa.
La representante precisó que la explosión no provocó incendios.
Uno de ellos sufrió quemaduras del 10% del cuerpo mientras el otro tiene quemaduras muy graves en la cara.
Holecek explicó que la explosión se produjo durante la limpieza de un tanque.
"Las operaciones en la planta tras la explosión están reducidas al mínimo, en el lugar trabajan policías, servicios de ambulancia y bomberos", declaró el jefe municipal al agregar que se lleva a cabo una investigación para aclarar las causas del accidente.
La planta pertenece a la petrolera checa Unipetrol que confirmó lo ocurrido en su página web y aseguró que actualmente la situación está bajo control.
En un principio se informó que el propietario de la planta era la compañía privada polaca Synthos que también opera en la ciudad.