Anteriormente el canal estadounidense CBS afirmó que en las filas de las milicias aliadas de Damasco que atacaron el 7 de febrero en Deir Ezzor a la facción denominada Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), apoyada por Washington, había mercenarios rusos.
La coalición encabezada por Estados Unidos acudió en ayuda de las FDS y bombardeó a las fuerzas gubernamentales sirias.
El organismo precisó que los militares rusos "no están desplegados en la zona de la provincia de Deir Ezzor", donde tuvo lugar el ataque contra los milicianos, que provocó 25 heridos.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, llamó a "no utilizar información errónea" sobre la muerte de los ciudadanos rusos en Siria.
Una fuente diplomática de Rusia calificó de "pura desinformación" la noticia sobre la muerte de rusos por ataques de la coalición.
Rusos no militares en Siria
El portavoz del Kremlin pidió seriedad a los medios a la hora de narrar episodios potencialmente importantes y "no caer rehenes de datos tergiversados".
Sin embargo, el portavoz no descartó la presencia de otros ciudadanos de Rusia en Siria, además de los militares.
"No se puede excluir que en Siria se encuentren ciudadanos rusos que no tengan nada que ver con las Fuerzas Armadas", indicó Peskov.
A la vez Peskov señaló que las autoridades por ahora no planean imponer restricciones algunas a los viajes de sus ciudadanos a Siria.
Rusia lanza bombardeos aéreos contra los terroristas en Siria a partir de 2015, por petición del presidente Bashar Asad.
En diciembre pasado el Estado Mayor General de Rusia anunció que todos los territorios controlados antes por los terroristas de Daesh en Siria fueron liberados, tras lo cual el presidente ruso, Vladímir Putin, ordenó el tercer recorte del contingente ruso emplazado en el país árabe.
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En Siria opera también la coalición encabezada por Estados Unidos de más de 70 miembros.
A diferencia de Rusia los ataques de la coalición contra Daesh en el país árabe no están autorizados por el Gobierno ni por el Consejo de Seguridad de la ONU.