El magistrado remarcó que "no hay manifiesta coacción ilegal" contra el expresidente y que el Supremo deberá decidir sobre el tema en plenario (cuando votan todos los jueces).
Los abogados del exmandatario habían presentado una petición de "hábeas corpus", tipo de beneficio que la Justicia puede conceder siempre que alguien sufra o se sienta amenazado de sufrir "violencia o coacción en su libertad de movimiento, por ilegalidad o abuso de poder".
Sus abogados alegan que Lula no puede ir a prisión hasta que se resuelvan todos los recursos en las instancias judiciales superiores, y por eso presentaron este recurso.
Lula fue condenado por presuntamente haber recibido un apartamento de manos de la constructora OAS como contrapartida por los favores prestados dentro de la trama corrupta de la petrolera semiestatal Petrobras.
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El líder izquierdista niega las acusaciones y remarca que se trata de una persecución que intenta apartarle de las elecciones generales de octubre, para las que parte como claro favorito en todas las encuestas.
