Según varios representantes del Ministerio de Defensa nipón citados por la cadena televisiva NHK, el 20 de enero un avión de patrulla de la Guardia Costera japonesa detectó un acercamiento de dos embarcaciones en el mar de China Oriental.
Desde finales de 2017 los buques de la Fuerza Marítima de Autodefensa de Japón participan —a petición de EEUU— en el patrullaje con el objetivo de detectar petroleros extranjeros que realicen bombeo de crudo y sus derivados en alta mar a barcos norcoreanos en violación de las sanciones intencionales.
Las tensiones en la península de Corea escalaron el año pasado, a medida que Corea del Norte persistía en sus ensayos nucleares y de misiles balísticos, en violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
En respuesta, el Consejo amplió a finales del 2017 las sanciones contra Pyongyang, en particular en el ámbito de la compra de hidrocarburos.