Los ahorradores que invirtieron su dinero en criptomonedas como el ethereumand y el litecoin obtuvieron los mejores beneficios. Sus ingresos se incrementaron en un 6.000%. Al mismo tiempo, los inversores que optaron por el bitcoin aumentaron su apuesta en un 1.500% durante 2017.
Entre las monedas tradicionales, el metical mozambiqueño ocupó el primer lugar de la lista. Su tipo de cambio con relación al dólar estadounidense subió un 21% en 2017.
Por el contrario, este año, el som uzbeko sufrió una fuerte devaluación. Su tipo de cambio se desplomó un 60%. A comienzos de septiembre el Banco Central de Uzbekistán devaluó el tipo de cambio de la moneda nacional desde los 4.210 somes por dólar hasta los 8.100.
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Los inversores que prefirieron apostar por las materias primas obtuvieron los mayores beneficios con el paladio. El valor de este metal utilizado en los artículos de joyería y los sistemas de control de gases de escape se incrementó en un 54% y alcanzó los 1.060 dólares por onza —equivalente a 28,75 gramos—.
Los precios del cobre y el aluminio aumentaron un 29%. Los economistas de Bloomberg vinculan este aumento con la mejora de los pronósticos económicos en todo el mundo y las previsiones de crecimiento en el consumo de metales no ferrosos.
Los bonos corporativos de la empresa holandesa Ajecorp —de bebidas embotelladas— crecieron un 82,8% y los de las compañías estadounidenses Chinos Intermediate Holdings A y Pinnacle Operating Corporation subieron un 79% y un 76,6%.
En el otro extremo, las mayores pérdidas fueron para los tenedores de deuda de Venezuela, que perdieron más del 55% de su inversión. Los que optaron por los bonos de las empresas Cenveo Corp, FGI Operating y Concordia International, por su parte, perdieron el 70,6%, el 67,3% y el 59,5% de sus ahorros en 2017.
Los bonos de la empresa indonesia Indo Energy Finance dieron los mayores beneficios entre los bonos corporativos de países en vías de desarrollo. Los bonos de la compañía brasileña Odebrecht SA, involucrada en un escándalo de corrupción que afecta a todo el continente, se devaluaron especialmente.
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En cuanto a los índices bursátiles, el mayor crecimiento lo experimentó el UX ucraniano, que subió un 80%. Esta alza, según los expertos de Bloomberg, estuvo inspirada por las esperanzas en la recuperación de la economía de Ucrania.
Los índices bursátiles de Kazajistán y Mongolia subieron un 64% y un 63%, mientras que los de Pakistán, Catar y Omán cayeron un 22%, un 16,5 % y un 9%.