El estudio analizó el comportamiento de los gusanos Caenorhabditis elegans —a menudo utilizados como modelo experimental—, una especie de nematodo que puede ser hermafrodita o macho. Los científicos han descubierto una insólita consecuencia del sexo en la longevidad de los seres vivos.
Según el estudio, publicado en la revista Cell Reports, los hermafroditas han evolucionado para detener sus actividades reproductivas hasta que su entorno vuelva a ser favorable.
"Esperamos que este estudio nos ayude a responder a nuestras preguntas fundamentales sobre cómo evoluciona el envejecimiento y cómo se determina la esperanza de vida", afirmó Sakiko Honjoh, de la Universidad de Tsukuba y autora principal del estudio.
Tales conexiones inusuales entre el envejecimiento, el sexo y la dieta, de acuerdo con los biólogos nipones, pueden existir entre otras especies de animales multicelulares. Se espera que el estudio ayude a aclarar por qué la restricción de calorías tiene diferentes efectos en la vida de los humanos, de otros mamíferos y otros seres vivos.
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