"Yo tomaré posesión el jueves con el objetivo de contribuir a que votemos la semana que viene; sin duda alguna si no lo conseguimos sentiré que hemos perdido una batalla, pero no la guerra", aseguró en declaraciones a la prensa recogidas por el portal de noticias G1.
Marun (del gobernante Partido del Movimiento Democrático Brasileño) fue nombrado por el presidente Michel Temer el pasado fin de semana para asumir el cargo en sustitución de Antonio Imbassahy (del aliado Partido de la Social Democracia Brasileña), aunque asumirá el cargo de forma oficial el 14 de diciembre.
La reforma del sistema de pensiones lleva encallada desde hace casi un año debido a su impopularidad entre la opinión pública, al miedo de los aliados de vincularse excesivamente al Gobierno de Temer y a que se necesita una amplia mayoría (dos tercios de los votos del plenario), puesto que exige modificar la Constitución.
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La prisa del Gobierno por aprobar la reforma antes de 2018 se debe a que el año que viene los partidos empezarán a centrarse en la carrera electoral de cara a las elecciones de octubre y evitarán involucrarse en medidas impopulares para no desgastar su imagen.
El Gobierno considera la reforma imprescindible para garantizar las pensiones en el futuro y reducir el déficit público, pero la oposición y los sindicatos critican que supone un retroceso.
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La reforma de las pensiones es la principal medida económica pendiente del Gobierno de Temer, que ya consiguió aprobar una polémica reforma laboral y una enmienda constitucional que congela el gasto público por los próximos 20 años.