"No nos consta formalmente que el Gobierno ruso esté detrás de esto, pero sabemos de donde viene este tráfico que está vinculado con redes de desinformación que tienen su sede o su punto de propagación en Rusia", afirmó el mandatario.
"Esta información la hemos compartido con las autoridades rusas", informó el mandatario.
El ministro explicó que son "multiplicaciones de explicaciones falsas que contribuyen a aumentar la desinformación y la manipulación".
"No estoy pensando que hayan conseguido por si solas condicionar a la opinión en tal o cual país. Hay que estar atentos a cualquier manifestación de este tipo porque lo que pretende es debilitarnos a todos", aseguró en rueda de prensa.
El Gobierno informó que estas supuestas cuentas falsas se pusieron en marcha a raíz del referéndum soberanista celebrado en Cataluña el pasado 1 de octubre, y que de todas las analizadas "solo 3 eran auténticas y las otras eran falsas, con el objeto de multiplicar informaciones poco exactas".
El debate en Bruselas concluyó sin decisiones ni recursos para frenar estas supuestas injerencias, aunque algunos de los países abogan por "desarrollar esfuerzos que permitan aumentar la contribución".