"Estamos en condiciones de poder celebrar con garantías el referéndum de autodeterminación (…) el objetivo es que todos los catalanes y catalanas puedan votar", declaró el conseller de Presidència de la Generalitat de Catalunya, Jordi Turull.
"Aquellas personas a las que les hayan cerrado su centro de votación habitual podemos decirle que hemos desarrollado un sistema por el cual podrán votar en cualquier centro que encuentren abierto", declaró en rueda de prensa el portavoz del Gobierno catalán.
Cada mesa electoral, según él, dispondrá de un sistema en el que se podrá consultar un censo electoral único y "validar que nadie haya votado anteriormente".
"Esto hará que el proceso sea más lento pero permitirá que todos puedan votar siempre que haya un colegio abierto", añadió Turull.
"Se podrá votar con la papeleta doblada y las urnas translúcidas garantizarán el anonimato", aseguró.
El conseller añadió que "si hay alguien que traiga la papeleta de casa con el modelo oficial, todas estas papeletas podrán ser utilizadas".
El Ejecutivo catalán justificó la adopción de esta medida como una solución de contingencia ante los diferentes golpes policiales contra la logística del referéndum, sobre todo después de que la Guardia Civil interviniera este sábado los servicios informáticos utilizados para el recuento de votos.
Para velar por la validez de este proceso, según explicó Turull, el Gobierno catalán invito a “un grupo de académicos y profesionales” que realizarán una labor de acompañamiento y observación.
En vivo: El referéndum catalán: cómo transcurre el día más importante para Cataluña
El Gobierno de España calificó el plebiscito de ilegal y desplegó fuerzas policiales adicionales para impedir que el referéndum se celebre.