De acuerdo con el medio, los agentes de seguridad encontraron en el ordenador del invidente un total de 71 imágenes pornográficas de menores, de las cuales, 12 fueron catalogadas como "de la peor clase".
El hombre, acompañado de su esposa, también ciega, y un perro lazarillo, se presentó ante la corte de Blackpool (condado de Lancashire). Shaw indicó que no se percató que las fotografías que había descargado eran de menores de 16 años.
A su vez, el abogado del hombre, Allan Cobain, señaló que su cliente "no tiene visibilidad en un ojo y en el otro, tiene un mínimo de visibilidad", así que "no pudo distinguir las edades de las personas que aparecían en las fotos".
En cuanto al invidente, se le concedió la libertad bajo fianza.