El académico indicó que a pesar de la dificultad de generalizar sobre un continente tan diverso, se trata de una región "que tiene una potencialidad de crecimiento enorme", un elemento que no ha pasado por alto en la lectura que están haciendo otras potencias a nivel internacional.
"África crece a tasas bien interesantes, que van a superar los promedios internacionales de crecimiento —4,3% en el 2018— lo que supera ampliamente las perspectivas de América Latina. Además hay un crecimiento en el consumo, un fenómeno de urbanización notorio, por lo tanto hay también cada vez más adquisición de bienes y de servicios que merecen atención", dijo Bartesaghi en diálogo con el programa Contante y Sonante de Sputnik.
"No es una zona que esté muy activa en el cierre de acuerdos comerciales con otros actores a nivel internacional. Esto es algo que va a cambiar y progresivamente los países africanos se van a abrir al mundo y van a cerrar acuerdos comerciales. Ante eso hay que tener una estrategia definida, que América Latina no tiene", opinó el analista.
Mientras que el Norte y el Sur de África presentan altos grados de desarrollo, el centro del continente está por detrás en términos de infraestructura. La existencia de conflictos tribales y de inestabilidades políticas en algunos de estos territorios dificultan su capacidad de descollar en el contexto mundial.
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"Es un mercado para el que se necesita muchísima inteligencia comercial para acceder, pero sobre el que todavía tenemos deficiencias, porque exportamos muy poco", explicó Bartesaghi sobre las oportunidades de comercio para América Latina.
Le sigue Argentina, con productos similares que coloca por cerca de 5.000 millones, dijo el experto. De esta manera, ambos países han encontrado en África una vía para diversificar sus mercados y exportar productos para los que encontraban barreras en otros destinos.
Otros países del Mercosur, como Paraguay, Uruguay y Venezuela, tienen un comercio muy bajo, "focalizado en productos primarios de poco proceso productivo, fundamentalmente cereales, semillas, algo de pescados y lácteos".
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"Observamos que cada vez más países africanos están incorporando normas internacionales que favorecen el entorno de negocios, por lo tanto tenemos que seguir de cerca esto", valoró Bartesaghi.
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— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 28 de julio de 2017
Economías emergentes como Rusia o la India están también visualizando oportunidades en África a través de relaciones estratégicas. Pero el ejemplo "más claro", en opinión del experto, es China.
"Hay más de 3.500 empresas chinas en África y las inversiones que se están llevando a cabo en puertos y ferrocarriles para tener acceso a recursos minerales ponen al gigante asiático en un sitio de privilegio en una zona del mundo que durante mucho tiempo fue abandonada por las potencias clásicas como EEUU y Europa", concluyó.