El 5 de agosto, la Policía italiana anunció que había detenido al secuestrador de la mujer, quien supuestamente la drogó, amordazó y llevó a un poblado del norte del país para luego subastarla como esclava sexual en internet por 300.000 bitcoins.
Model Allegedly Kidnapped and Put Up for Sale on The Dark Web | https://t.co/YlzNd4JARq | #ChloeAyling pic.twitter.com/oDz7vl9jBH
— Social Race Media (@SocialRaceMedia) 7 августа 2017 г.
No obstante, los vecinos de la localidad donde estaba retenida Ayling afirmaron haber visto al detenido y la modelo en una zapatería —a donde fueron juntos a comprar un par de zapatillas para ella—, y en un bar de la zona el día antes de la liberación de la mujer, informó el periódico italiano Corriere Della Serra.
Según otras fuentes, Ayling conocía personalmente a su secuestrador, Lukasz Herba, y ya se habían encontrado en París en abril de 2017.
Por su parte, el abogado de la modelo, Francesco Pesce, niega que el caso sea un montaje.
"La información de que ella forma parte de una trama, como he leído con disgusto en algunos periódicos esta mañana, es inconcebible", declaró a la agencia Reuters. El letrado subrayó también que los secuestradores amenazaron a la mujer con matarla si huía de la casa.
De acuerdo con la propia modelo, llegó a Milán para una sesión de fotos pero fue drogada con ketamina y metida en una bolsa dentro de un automóvil. Posteriormente, cuatro o cinco personas la llevaron hasta un pueblo del norte de Italia, donde fue retenida durante seis días.