Ivanka Trump, quien es también asesora de la Casa Blanca, causó mucha polémica tras ocupar la silla de su padre durante una reunión a puerta cerrada dedicada a los problemas de África.
When I left Conference Room for short meetings with Japan and other countries, I asked Ivanka to hold seat. Very standard. Angela M agrees!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 10 июля 2017 г.
"Cuando me marché de la Sala de Conferencias para atender una corta reunión con Japón y otros países, le pedí a Ivanka que ocupara mi asiento. Algo muy estándar. ¡Angela M[erkel] está de acuerdo!", tuiteó el mandatario.
Poco después del primer tuit, Trump publicó otro en el cual reclamó: "Si a Chelsea Clinton le hubieran pedido que guardara el asiento a su madre, mientras su madre regalaba nuestro país, los medios de noticias falsas dirían ¡CHELSEA PARA PRESIDENTA!".
If Chelsea Clinton were asked to hold the seat for her mother,as her mother gave our country away, the Fake News would say CHELSEA FOR PRES!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 10 июля 2017 г.
La delegación rusa en la cumbre del G20 consideró justificada la presencia de Ivanka en la cumbre. La sherpa rusa, Svetlana Lukash, subrayó que los líderes mundiales deciden por sí mismos quién va a participar en las reuniones junto con ellos.
El experto explica en su artículo para Sputnik que es importante entender que en las cumbres siempre se celebran dos tipos de reuniones: cuando se aprueban decisiones ya preparadas y cuando se discuten cuestiones poco triviales.
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De esta manera, prosigue Wasserman, es necesario que el propio líder esté presente en estas últimas, mientras que cualquier otro miembro de la delegación puede asistir a las "reuniones protocolares", que no requieren de toma de decisiones importantes.
"Por lo tanto, desde un punto de vista puramente informativo, los 'casos Ivanka' son inevitables (…) No fue un desprecio, sino una medida técnica", apunta.
Además, Wasserman destaca que los opositores de Trump "se indignan por el propio hecho de que las funciones presidenciales las desempeña un hombre, a favor de quien votó el pueblo y no los medios". De esta manera, es natural que acusen al presidente de "cualquier pecado mortal".