Durante el experimento, el equipo científico analizó los datos de 68,5 millones de personas de 195 países para analizar las tendencias de la obesidad en los niños y los adultos entre 1980 y 2015. Los investigadores llegaron a la conclusión de que, actualmente, más del 10% de la población mundial —en concreto, 107,7 millones de niños y 603,7 millones de adultos— son obesos.
Según indican los científicos, en las últimas décadas, la obesidad se duplicó en más de 70 países del mundo, sobre todo, en las regiones de ingresos bajos y medios.
"La mayor disponibilidad, accesibilidad y asequibilidad de los alimentos energéticos, junto con la comercialización activa de tales alimentos, pueden explicar el consumo calórico excesivo, así como el aumento del peso", subrayaron los investigadores. Además de esto, afirmaron que los tamaños de las porciones por persona también han aumentado significativamente.
Al mismo tiempo, no tenemos que sobrevalorar la importancia del ejercicio físico, ya que es imposible obtener resultados significativos sin llevar una dieta saludable.
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Además de esto, los científicos advirtieron de un aumento en la obesidad infantil. Así, en EEUU, el 13% de los niños tiene sobrepeso. Según el estudio, la obesidad en la edad más joven es perjudicial para el corazón, así como aumenta el riesgo de muerte temprana.
"Hay una generación de más de 100 millones de niños que tendrá que luchar durante toda su vida con enfermedades vinculadas con el sobrepeso, como la diabetes y las enfermedades cardíacas", se lamentó Andrew Stokes, de la Universidad de Boston, en una entrevista con el portal Vox.
No obstante, hay países donde el índice de obesidad sigue siendo bastante bajo, como Vietnam y Bangladés. Según indicó Stokes, este hecho constituye un motivo para ser optimistas, puesto que podría ayudar a los científicos a encontrar una solución para combatir la epidemia de obesidad a nivel mundial.
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El embajador mundial para las enfermedades no transmisibles de la OMS, Mike Bloomberg, declaró en un informe oficial que "esta es una epidemia global que no puede ser ignorada por los gobiernos, ya que hay muchos pasos que podemos dar para combatir la obesidad y salvar vidas".