"El bombardeo llevado a cabo por la Guardia de la Revolución Islámica contra los terroristas fue una represalia por los atentados de Teherán", dijo el diplomático en una mesa redonda organizada por esta agencia con motivo del Día Mundial de Al Quds (nombre árabe de la ciudad de Jerusalén).
El 7 de junio Teherán fue escenario de dos ataques terroristas reivindicados por Daesh, grupo autodenominado Estado Islámico y proscrito en varios países, incluida Rusia.
Once días después del doble atentado, el Ejército iraní lanzó desde el territorio del país seis misiles balísticos contra objetivos terroristas en la gobernación siria de Deir Ezzor.
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Los proyectiles, según el mando iraní, destruyeron cuarteles generales, depósitos de municiones y bases logísticas de los extremistas.