"Irán se ha comprometido a preservar la seguridad de la región, especialmente en las aguas compartidas, por lo que no se deben vincular estos ejercicios con algunos factores externos, en particular, con la crisis de Catar", afirmó a Sputnik el experto en temas de Oriente Próximo y profesor de la Universidad de Teherán, Hosein Ruyvaran.
El especialista agrega que se trata de una misión de mantenimiento de la paz acordada de antemano con las autoridades de Omán.
Los buques de guerra iraníes se desplazan en medio del agravamiento de la crisis que estalló entre Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Bahréin y Egipto, por una parte, y Catar, por la otra. Este último ha sido acusado por sus vecinos de patrocinar grupos terroristas, aunque muchos analistas consideran que la verdadera razón es la intención de Doha de acercarse a Teherán. De hecho, la República Islámica ha sido el único país de la región que, a pesar de sus diferencias, ha ayudado al emirato a sobrepasar el bloqueo que se le ha impuesto.
"Los conflictos y tensiones recientes, que surgieron a raíz de los ataques terroristas en Teherán, son la principal razón por la que los países árabes erróneamente perciben las maniobras de la Armada iraní como una amenaza potencial", opina Mehrabi.
El estrecho de Adén separa la costa de Somalia, en África, del territorio yemení en la península arábiga. El primer terreno se ha convertido en un foco de grupos piratas que aterrorizan la región. Mientras, Yemen lleva varios años sumido en un conflicto armado entre los hutíes —partidarios de Irán— y grupos suníes apoyados por Arabia Saudí.
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