"En total 64 personas siguen un tratamiento en hospital, 20 se encuentran en estado crítico", dijo a la prensa.
Más temprano se informó de 59 hospitalizados.
En la noche del 22 de mayo, poco después de que terminara un concierto de la cantante estadounidense Ariana Grande, tuvo lugar una explosión en los alrededores del estadio Manchester Arena, cuando los espectadores estaban abandonando el recinto.
El atentado causó al menos 22 muertos y 119 heridos, mientras a ocho personas les dieron por desaparecidas.
El grupo terrorista Daesh (autodenominado Estado Islámico, proscrito en Rusia y otros países) reivindicó este ataque.