"Esto era un problema porque no solo creíamos que los rusos estaban en conocimiento de esto, sino que probablemente tuvieran pruebas de esta información, y eso creaba una situación comprometedora, una situación en la que el consejero de Seguridad Nacional podía ser chantajeado por los rusos", dijo Yates en una audiencia del Subcomité Judicial del Senado.
La ex fiscal general en funciones añadió que al Departamento de Justicia también le preocupaba que el vicepresidente Pence estuviera mintiendo sin querer al pueblo estadounidense cuando comentó lo que Flynn le había asegurado.
Las autoridades de Rusia han negado en repetidas ocasiones cualquier interferencia en las elecciones estadounidenses, asegurando que esas acusaciones eran un intento de desviar la atención del público de los problemas internos del país.