"Se habló mucho de que unas 200 toneladas de sustancias químicas de origen libio cayeron en manos de los terroristas en la región siria (…), las tiene Daesh (autodenominado Estado Islámico proscrito en Rusia)", señaló agregando que "las armas químicas que estaban en el territorio de Siria controlado por las autoridades fueron liquidadas, de lo que informó una comisión competente de la ONU".
La oposición siria denunció el 4 de abril un supuesto ataque químico en la ciudad de Jan Sheijun, de la provincia de Idlib, que se saldó con más de 80 muertos y 200 heridos, según la Organización Mundial de la Salud, y culpó a las tropas gubernamentales, que a su vez rechazaron esa acusación.
El Ministerio de Defensa de Rusia comunicó que la tragedia se produjo tras el bombardeo por la aviación siria de los depósitos de municiones terroristas cerca de Jan Sheijun que contenían armas químicas destinadas para los yihadistas de Irak.
Moscú instó a la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) a investigar lo sucedido.