A su vez, algunos internautas rusos publicaban en Facebook algunas bromas al respecto. Un ejemplo: fotos del presidente ruso, Vladímir Putin, "firmando" un decreto para nombrar a Trump como su "representante en el distrito federal ruso de EEUU".
Pero han pasado ya varios meses y no se han registrado progresos en las relaciones. En este sentido, en una reciente entrevista televisada, Putin dijo que desde la salida del anterior presidente Barack Obama, los contactos entre Moscú y Washington se han degradado, y que actualmente hay todavía menos confianza.
Es decir que "nuestro hombre en Washington", no sólo no ha respondido a las expectativas, sino que puso a su país al borde de un enfrentamiento armado con Rusia al ordenar el ataque con misiles contra una base aérea del Ejército sirio. Así de claro se expresó el primer ministro ruso, Dmitri Medvédev.
Las últimas ilusiones se esfumaron en la víspera de la visita a Moscú del secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson. Según los medios internacionales, otro supuesto "agente de Moscú" y casi amigo de Vladímir Putin.
Poco antes de aterrizar el avión del Secretario de Estado estadounidense en Moscú, Trump puso un ultimátum al Kremlin: elegir entre Occidente y el presidente sirio Bashar Asad.
De poco le sirvieron las negociaciones de varias horas con su homólogo ruso, Seguéi Lavrov. En contra de lo que se esperaba en Washington, Moscú no está dispuesta a ceder en su posición sobre Siria.