Se indica que 2.000 personas se vieron obligadas a abandonar sus casas por el diluvio, causado como resultado del ciclón que afectó a Australia hace una semana.
A los ciudadanos les aconsejan dirigirse a las ciudades cercanas de Kawerau y Whakatane donde se organizaron centros de evacuación.
Al mismo tiempo, se precisa que los caminos de la ciudad están intransitables.
La semana pasada el ciclón Debbie se acercó al noreste de Australia con vientos de hasta 263 kilómetros por hora.
El nivel de peligro se estableció en categoría cuatro.
El ciclón causó numerosos daños y dejó a decenas de miles de personas sin electricidad.